“La niña de los tulipanes I”

 “La niña de los tulipanes I”

(Un cuento sin cuento)

Erase una vez, como solo sucede una vez, en la vida de una doncella, que sin saberse bella, la naturaleza la llenado de encantos, como llena de flores un jardín.

En esos conatos de primavera, ella era apenas una niña, pero con esa plantita en el corazón, que crece alimentada por las ilusiones más puras y los sueños más cristalinos que un alma blanca puede tener.

Sus ojos eran como dos soles, destellando lucesitas de inspiración, aún no llegaba a su vida esa primera ilusión, era como un tulipán que no conoce la primavera, pero la espera.

Ella era solo una niña, de esas que sueña con la felicidad, de esas que escriben historias en su corazón, con pinceles de colores que se tiñen de emoción… Ella era solo una niña solitaria, solitaria como un sentimiento que en su pureza va creciendo como crece la hierba en el campo, como crece un tulipán en primavera, como crece el sarmiento en la viñera, era una flor esperando la primavera.

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