Era primavera, no solo allá afuera, sino en el alma… Pues sin importar la edad, ya que el alma la trasciende y en el corazón enciende una luz, que ilumina nuevas esperanzas y anhelos.
Era primavera y la invierte a un café, café que tiene el sabor de sus besos de amor y puse sobre la mesa, para su sorpresa, unos bellos tulipanes, que tiene la textura de su piel, el color de su alegria y aman la vida, como yo la amo a ella, con estoicismo, con ternura y con la frescura de la primavera en mis manos.
Oxwell L’bu copyrights 2022
#Tulipanesycafe
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